LA PAZ, El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas reiteró que el incremento salarial del 3% al haber básico y 4% al mínimo nacional es, en gran medida, una reposición por el alza del costo de vida en los últimos dos años.
Mediante un comunicado, esa cartera explicó que la riqueza en Bolivia la generan los trabajadores del campo y las ciudades, jóvenes, asalariados y no asalariados, y es gracias a ese trabajo que creció la economía de Bolivia y también la de los empresarios.
“Los incrementos salariales son parte de las medidas redistributivas del ingreso para los sectores más vulnerables, en el marco del crecimiento económico con justicia social que refleja el Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP)”, señala.
David Card (Premio Nobel de Economía 2021) demostró empíricamente que incrementos en el salario mínimo no generan desempleo en ciertos contextos. Los datos sugieren que esta condición se cumple en Bolivia, debido a que el salario mínimo nacional aumentó de Bs 440 en 2005 a Bs 2.250 en 2022, mientras que la tasa de desempleo disminuyó de 8,1% a 5,2% en similar lapso de tiempo.
En febrero de 2022, la población ocupada urbana superó los 4,1 millones de personas; este registro es considerablemente superior a la población ocupada observada en febrero de 2019 (prepandemia) que era de alrededor 3,5 millones de personas. En este marco, el empleo está en mejores condiciones respecto a la situación prepandemia.
Asimismo, la tasa de desocupación de la población de 16 a 28 años de edad (jóvenes) en marzo de 2022 fue de 8,3%, que es inferior a la observada en marzo de 2019 (prepandemia) cuando reportó un 11,2%. En este marco, el empleo en jóvenes está en mejores condiciones respecto a la situación prepandemia.
“Por lo expuesto, llama la atención las declaraciones realizadas por el presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), Fernando Hurtado, quien -en una conferencia de prensa- aseguró que tendrán que endeudarse e invertir menos para cumplir con el aumento salarial. El Estado ha brindado todas las oportunidades para poder incrementar la productividad del sector privado, como la estabilidad económica que brinda certidumbre”, afirmó el Ministerio de Economía.
Le recordó a la Cainco, que el Gobierno brinda apoyo a través del subsidio a los combustibles, incentivos tributarios para la importación y comercialización de bienes de capital, créditos productivos, la constitución de fideicomisos para la expansión del crédito, entre los principales; además del importante acompañamiento de la inversión pública mediante la construcción de carreteras, entre otros.
El mayor flujo de actividad económica se evidencia a través del crecimiento económico de la gestión 2021 de 6,1%; donde los sectores que más se expandieron fueron minería (37,7%); construcción (17,9%); transporte y almacenamiento (21,8%); electricidad, gas y agua (7,8%); comercio (7,0%); e industrias manufactureras (3,9%), principalmente. Además, de los subsectores como otras industrias manufactureras (14,4%); productos minerales no metálicos (13,9%) y productos agrícolas industriales (6,5%), sostuvo.
Señaló que si se toma como referencia a las ventas facturadas de la agricultura y la industria manufacturera (las empresas que facturan en estas actividades son principalmente privadas), las ventas de la gestión 2021 fueron superiores a las de prepandemia en 2019. Por lo tanto, existe evidencia de la recuperación en las ventas.
También lo datos muestran que en la gestión 2021 se crearon más empresas que en 2019 (prepandemia). Es más, a marzo de 2022 se inscribieron más empresas que lo registrado a marzo de 2021. Por lo tanto, las nuevas empresas podrán crear nuevos empleos. (Abi)
