La Paz, 17 de diciembre del 2025 (COMIBOL)
A 83 años de la sangrienta Masacre de Catavi, la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), rindió un solemne homenaje a los mártires del 21 de diciembre 1942. Esta matanza develó ante el pueblo boliviano la explotación del estaño en beneficio de intereses extranjeros.
Andrés Paye, secretario ejecutivo de la FSTMB, rememoró la heroica lucha de los trabajadores y reafirmó el compromiso de la actual dirigencia. “Como una generación que retoma la historia y sigue el ejemplo de sus antecesores, nuestra misión es defender siempre a Bolivia, a nuestra sociedad y, fundamentalmente, al sector minero”, enfatizó.
Por su parte, el exdirigente minero Guillermo Dalence, trazó paralelismos históricos, destacando que la visión, organización y la lucha de los trabajadores mineros marcó la defensa de los derechos conquistados por la clase obrera.
Durante el acto, la memoria histórica cobró protagonismo con la entrega de documentos inéditos por parte de la familia del compañero Milton Gomes al Sistema de Documentación e Información Sindical (SIDIS). Asimismo, un ex trabajador de Quechisla aportó valiosa documentación sobre posibles reservas mineralógicas en la zona para su respectivo estudio técnico.
En ese contexto, la FSTMB suscribió un convenio con el Hospital Arco Iris para fortalecer el sistema de “seguro delegado”. A esta iniciativa se sumó la Universidad Nacional Siglo XX (UNSXX), que firmó otro acuerdo interinstitucional para que estudiantes de diversas carreras realicen pasantías en dicho centro hospitalario.
También se entregaron reconocimientos a los diferentes sindicatos mineros afiliados a la organización matriz.
Del acto participaron autoridades de gobierno, dirigentes sindicales e invitados especiales.
Masacre de Catavi
La Masacre de Catavi, ocurrida el 21 de diciembre de 1942, dejó un saldo trágico de mineros, mujeres y civiles acribillados por fuerzas del gobierno de Enrique Peñaranda, por orden de la Patiño Mines & Enterprises. La protesta, que exigía aumentos salariales y estabilidad en los precios de las pulperías por parte del Sindicato de Oficios Varios de Catavi fue acallada por las armas, pero germinó en la identidad del movimiento obrero.
En ese contexto, la Ley de 18 de diciembre de 1944, promulgada bajo la presidencia del Teniente Coronel Gualberto Villarroel, en su primer artículo declara como “Día del Trabajador Minero Boliviano” cada 21 de diciembre, en homenaje y memoria de los caídos en la masacre de Catavi.
