La Paz, Agosto de 2020.- El Director General Ejecutivo del Instituto Nacional de Estadística (INE), Yuri Miranda Gonzales, en entrevista, por distintos medios nacionales, manifestó que “entre enero y julio, las exportaciones llegaron a 3.767 millones de dólares, mientras que las importaciones alcanzaron a 3.757 millones de dólares. Después de la caída registrada en el mes de abril, por efectos del COVID-19 en el país, podemos apreciar que, en el contexto de la pandemia, existe una reactivación de la economía, presentando un mejor comportamiento en exportaciones e importaciones”.
Miranda se refirió a datos de la economía del país, a las últimas cifras de comercio exterior, saldo comercial, exportaciones e importaciones, inflación en tiempos de pandemia y a las políticas de transparencia y apertura de la información que se lleva adelante en la institución.
Bolivia registró un saldo comercial negativo de 10 millones de dólares, debido a que las importaciones han sido ligeramente superiores a las exportaciones, principalmente, en Bienes de Capital para la Industria como para el sector agropecuario.
La autoridad destacó que, “el crecimiento económico del país se mide por dos aspectos, uno, por la oferta en la producción de Bienes y Servicios, y el otro, por la demanda, donde se encuentra la inversión, las exportaciones, el consumo de los hogares y el consumo de la administración pública”.
Según la explicación del director, el Producto Interno Bruto (PIB), revela que, por parte de la demanda externa, las exportaciones han sido muy importantes para alcanzar el crecimiento de 0,6% al primer trimestre de este año. Sin embargo, esa variación no sería comparable con un año anterior, ni con uno posterior por razones, principalmente, de la pandemia.
El sector exportador, en julio, se habría recuperado bastante, respecto al mes de abril. Sin embargo, en julio respecto a junio, la actividad minera presentó menores valores de exportación, es decir, su producción se habría relentizado, debido a que la minería a gran escala, privada, sobre todo, tiene restricciones laborales como efecto de la pandemia. Además, se registró una menor demanda de los países que compran minerales, como China.
Asimismo, la autoridad del INE señaló que la inflación es otro indicador macroeconómico importante, “los bloqueos afectaron significativamente a la economía del país, en cuanto a precios de los diferentes productos, como la carne de pollo, zanahoria y otros; sin embargo, los precios volverán a un estado estacionario después de haber superado estos problemas”.
En cuanto a las variaciones de precios, según la explicación de Miranda, el INE hace una observación de la economía del país, “saca la fotografía del momento” y la de julio indica que Bolivia presenta una inflación de 0,14%.
Para finalizar, “es importante dar un mensaje alentador a la población, pues este año es muy complicado para todos, debido al efecto de la pandemia, pero se observa que la economía se está reactivando, pues los datos muestran variaciones menos negativas y es importante comprender las actividades que el INE está realizando para que las estadísticas oficiales del país no presenten algún corte y puedan estar a la disposición de la población y de los tomadores de decisiones”, acotó Miranda.