Nueva York, Estados Unidos, En su mensaje en la 77 Sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente Luis Arce abogó que el “diálogo y la diplomacia puedan triunfar” y “reparar las injusticias de una guerra”, que dejó a Bolivia sin acceso soberano al Pacífico.
“Debemos recordar a la comunidad internacional que mi país, Bolivia, nació con mar, sin embargo, en la actualidad es un país enclaustrado, obligado por las circunstancias del pasado a enfrentar múltiples barreras para el transporte, comunicación y comercio”, informó en alusión a la invasión chilena y posterior guerra del Pacífico de 1879 que acabó cercenando suelo boliviano.
“Esperamos que más temprano que tarde el diálogo y la diplomacia puedan triunfar para reparar las injusticias de una guerra impulsada por intereses capitalistas y construir así un mejor futuro entre pueblos hermanos”, abogó cuando habló de la necesidad de fortalecer los mecanismos internacionales para un trato preferencial a los países sin litoral, como Bolivia.
Los gobiernos de Arce y del presidente de Chile, Gabriel Boric, decidieron la reactivación de la Hoja de Ruta acordada en La Paz, en abril del 2021.
Las relaciones entre ambos países estuvieron congeladas, como consecuencia de la demanda marítima en la Corte Internacional de Justicia (CIJ). La justicia falló en contra de Bolivia y estableció que Chile no tiene obligación de cumplir sus compromisos de negociar una salida soberana al Pacífico, sin embargo dejó abierta la posibilidad de diálogo bilateral.
Arce hizo alusión al tema del mar en uno de los 14 desafíos planteados para enfrentar la crisis multidimensional del capitalismo y avanzar en la construcción de un mundo más justo, inclusivo y equitativo bajo los principios del “vivir bien” y la diplomacia de los pueblos.
“Me permito llamar su atención sobre el derecho al mar, que es uno de los grandes temas actuales de las relaciones jurídicas internacionales, ya que todos los estados mediterráneos o enclaustrados enfrentamos graves dificultades en su acceso al mar, y el aprovechamiento de sus recursos”, destacó.
“El mar es un derecho de los pueblos, por lo tanto, nadie debe estar privado de su disfrute y aprovechamiento para su desarrollo”, insistió y recordó que la falta de acceso al mar afecta doblemente en el desarrollo de los países sin litoral. (Abi)