LA PAZ, Las empresas públicas robustecen la producción del país e impulsan la industrialización de los recursos naturales y las materias primas, además financian programas sociales para mejorar la calidad de vida de la población, destacó el analista económico Martín Moreira.
Para el experto en Bolivia, las empresas públicas permiten combatir la pobreza, el desempleo y la desigualdad y entre todas de los diferentes sectores productivos son un motor principal de la economía, “hacia un futuro más próspero y equitativo”.
“Su contribución al proceso de diversificación productiva ha robustecido el tejido productivo del país y ha impulsado la industrialización. Además, estas empresas estatales generan empleo directo e indirecto y, a través de sus ganancias, financian políticas sociales y programas de redistribución de ingresos, lo que incide directamente en la mejora de la calidad de vida de la población”, destacó.
Moreira recordó que el año 2022 fue testigo de un destacado desempeño de las diferentes empresas estatales, entre ellas la Empresas Siderúrgica del Mutún, Boliviana de Aviación (BoA), Transportes Aéreos Bolivianos (TAB), la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) la Gestora Pública, Yacimientos de Litio Boliviano (YLB), entre otras.
“Estos resultados subrayan el papel fundamental que desempeñan las empresas estatales en la reactivación de la economía local y la generación de ingresos adicionales del país”, ponderó el analista.
Según el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, con excepción de la gestión 2020, las empresas públicas registraron utilidades, continuamente entre 2007 y 2022, alcanzando un acumulado que asciende a Bs 49.791 millones.
En ese contexto, Moreira mencionó que, durante las últimas dos décadas, la narrativa neoliberal procuró persuadir a la población sobre la supuesta «ineficiencia inherente» de las empresas estatales.
Esta línea de pensamiento, se llevó a la privatización y subvaloración de las empresas y recursos naturales, en un esfuerzo por transferirlos al sector privado a precios notoriamente bajos, lamentó.
“No obstante, la sociedad pronto captó la artimaña y encauzó su lucha hacia la recuperación de las empresas estatales y la salvaguarda de los recursos naturales, consciente de que la victoria en esta batalla determinaría el rumbo del país”, relievó.
Denunció que actualmente “se están gestando maniobras de ataque directo, camufladas bajo la fachada de análisis e investigación, las cuales encuentran su respaldo financiero en la fundación Vicente Pazos Kanki”.
“Esta entidad es propiedad del empresario Samuel Doria Medina, exministro de Planificación de Goni (Gonzalo Sánchez de Lozada), que ha obtenido beneficios personales significativos a partir de la privatización de varias empresas, las mismas que él impulsó”, recordó. (ACUERDOS)