Viacha, agosto de 2025.– En el marco de su estrategia de sostenibilidad y bajo el enfoque de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), SOBOCE entregó uniformes deportivos a más de 200 niñas, niños y adolescentes que forman parte de la Escuela Sociodeportiva de Viacha. Esta iniciativa es desarrollada en alianza con la Fundación Real Madrid y la Fundación Alalay, con el objetivo de promover el desarrollo integral de la niñez y adolescencia boliviana.
El proyecto de Escuelas Sociodeportivas busca que los participantes, además de adquirir habilidades deportivas, fortalezcan competencias emocionales y sociales clave como la autonomía, autoestima, respeto y equidad, mediante la metodología “Por una educación REAL: Valores y deporte”.
“Los uniformes que entregamos hoy reflejan el compromiso de SOBOCE de seguir apoyando las escuelas sociodeportivas no solo en Viacha, sino también en Tarija y Warnes. Esta entrega fortalece nuestra relación con la comunidad de Viacha y representa el esfuerzo conjunto con la Fundación Real Madrid y Fundación Alalay por promover valores y oportunidades para la niñez y adolescencia.,” afirmó Osvaldo Muñoz, gerente de Planta Viacha, durante el acto de entrega.
Además de Viacha, SOBOCE respalda dos escuelas sociodeportivas adicionales en Tarija y Warnes, beneficiando a más de 700 niñas, niños y adolescentes. En estos tres municipios, donde la empresa tiene presencia industrial, el proyecto refuerza el compromiso de SOBOCE con el desarrollo comunitario y el deporte como herramienta de transformación social.
Uno de los logros más significativos del proyecto, que SOBOCE impulsa desde hace más de un año, ha sido la reducción de la exposición de los participantes a entornos de riesgo, como la violencia, el abandono escolar y el consumo de sustancias. Los niños, niñas y jóvenes beneficiados han reportado mejoras notables en su autoestima, habilidades sociales y bienestar emocional.
Asimismo, las jornadas familiares y deportivas se han consolidado como espacios efectivos para fortalecer vínculos familiares y fomentar la cohesión social, promoviendo una convivencia armónica basada en valores compartidos.
“Nuestro compromiso es seguir apoyando esta iniciativa, porque nos permite construir, a través de la sostenibilidad y la innovación, una mejor calidad de vida para la sociedad”, concluyó Muñoz.
Con resultados tangibles en apenas un año y más de 1.400 beneficiarios, SOBOCE reafirma su compromiso con el desarrollo humano y social en las comunidades donde opera, apostando por un modelo empresarial que deja huella más allá del cemento: en la vida de las personas.
